El fiscal general de Texas, Ken Paxton, planea presentar denuncias penales contra los legisladores de la Cámara de Representantes que encabezaron su juicio político, alegando que lo engañaron cuando publicaron documentos que incluían la dirección de su casa la semana pasada.
La noticia fue reportada por primera vez por The Daily Caller y medios locales, incluido The Texas Tribune. Según se informa, Paxton planea presentar denuncias penales en cada uno de los ocho condados de origen de los administradores de la Cámara de Representantes, citando una nueva ley anti-doxxing que hace ilegal revelar o filtrar información personal con la intención de dañarlos.
La oficina de Paxton no respondió a una solicitud de comentarios.
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Paxton fue acusado esta primavera por acusaciones de corrupción y abuso de poder. El mes pasado fue juzgado en el Senado, donde fue absuelto de todos los cargos en el tribunal de acusación.
La semana pasada, los encargados del juicio político en la Cámara de Representantes publicaron una gran cantidad de documentos que, según dijeron, no habían sido presentados en el juicio debido a limitaciones de tiempo, decisiones procesales y otras razones. Según los informes, los documentos incluían la dirección de la casa de Paxton antes de que fuera redactada.
"Los responsables del impeachment claramente tienen el deseo de amenazarme con hacerme daño cuando publicaron esta información la semana pasada", dijo Paxton en un comunicado, señalando que su familia había recibido amenazas violentas.
Los documentos también hacían públicos los correos electrónicos entre el contratista de Paxton y Nate Paul, el donante de campaña que, según los responsables del impeachment de la Cámara, lo sobornó con renovaciones en su casa. En los correos electrónicos, el contratista de Paxton compartió actualizaciones y fotografías del trabajo que se estaba realizando en la casa de Paxton con Paul, un desarrollador de bienes raíces.
Los abogados de Paxton dijeron que pagó las renovaciones con una transferencia bancaria de seis cifras. Los fiscales de la Cámara de Representantes habían alegado que se trataba de un pago de encubrimiento realizado sólo después de que el propio personal de Paxton lo denunciara al FBI por presunto soborno.