WASHINGTON DC - El discurso de despedida del presidente Joe Biden del miércoles vino con una serie de advertencias para el futuro del país, incluida una sobre la creciente "oligarquía que está tomando forma" y que, según él, amenaza la democracia estadounidense.
"Hoy en día, está tomando forma en Estados Unidos una oligarquía de extrema riqueza, poder e influencia que literalmente amenaza toda nuestra democracia, nuestros derechos y libertades básicos y una oportunidad justa para que todos salgan adelante", dijo Biden.
Los comentarios de Biden, pronunciados desde la Oficina Oval, parecían claramente dirigidos al multimillonario Elon Musk, que ha estado al lado del presidente electo Donald Trump desde su victoria electoral, y al jefe de Meta, Mark Zuckerberg.
Biden también lanzó duras críticas a las plataformas de redes sociales, argumentando que están descuidado la verificación de datos.
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"Las redes sociales están renunciando a la verificación de datos. La verdad se ve sofocada por mentiras que se dicen para obtener poder y ganancias", dijo Biden, aparentemente haciendo referencia a que Meta puso fin a su programa de verificación de datos.
El presidente advirtió sobre los posibles peligros de la inteligencia artificial y la calificó como "la tecnología más importante de nuestro tiempo".
"Nada ofrece posibilidades y riesgos más profundos para nuestra economía y nuestra seguridad, nuestra sociedad", dijo mientras reflexionaba sobre sus cinco décadas en la política estadounidense.
Biden continuó, argumentando que sin salvaguardas, la inteligencia artificial podría "generar nuevas amenazas a nuestros derechos, nuestra forma de vida, a nuestra privacidad, a cómo trabajamos y cómo protegemos a nuestra nación".
El presidente Biden también dijo que le desea éxito a gobierno entrante de Donald Trump.
Pero pidió una nueva enmienda constitucional para garantizar que los presidentes no estén por encima de la ley, una aparente referencia a quien le sucederá en el cargo.
"No se trata solo de los últimos cuatro años de su gobierno. Está renunciando a su carrera", dijo el miércoles la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, sobre este mensaje a los periodistas.
“Así que pueden imaginar que el presidente tiene mucho que decir, muchos pensamientos que quiere compartir, realmente tocar el momento en el que estamos ahora”, agregó.
En una carta del miércoles que anticipaba sus comentarios en el horario de máxima audiencia, Biden promocionó el crecimiento persistente del empleo, los menores costos de los medicamentos recetados y las inversiones en energía limpia para combatir el cambio climático.
Describió los primeros días de su administración como una batalla para salir de las garras de la pandemia de Covid y "un invierno de peligro", diciendo que los estadounidenses se unieron y "lo superaron con valentía".
"Salimos más fuertes, más prósperos y más seguros", dijo Biden en la carta.
Biden también destacó su historial económico, en particular las ganancias constantes en el mercado laboral.
En una declaración la semana pasada elogiando el informe mensual final de empleos de su mandato, Biden dijo que se crearon más de 16.6 millones de nuevos empleos desde que asumió el cargo y que su administración fue "la única en la historia que ha creado empleos todos los meses".
Biden comenzó su discurso de despedida destacando un nuevo acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamas, y señaló que gran parte de él sería implementado por el gobierno entrante de Trump.
Si el acuerdo anunciado el miércoles por la tarde entra en vigencia este fin de semana como está planeado, sería un gran avance en la prolongada guerra que ha pesado sobre la presidencia de Biden y provocado críticas dentro de su propio partido.
En su carta, Biden no se refirió al presidente electo Donald Trump por su nombre, pero hizo referencias indirectas a él.
"Me postulé para presidente porque creía que el alma de Estados Unidos estaba en juego. La naturaleza misma de quiénes somos estaba en juego. Y ese sigue siendo el caso", dijo.
Jean-Pierre dijo que Biden quiere "ser positivo" y "hablar de lo que hemos sido capaces de hacer". También dijo que el discurso "no iba a ser partidista".
En su carta, Biden adoptó un tono personal y reflexionó sobre su educación y su vida como funcionario público. "En ningún otro lugar de la Tierra un niño tartamudo de orígenes modestos podría" servir durante 50 años en los pasillos del Congreso, como vicepresidente y, finalmente, en la Oficina Oval.
"He entregado mi corazón y mi alma a nuestra nación. Y he sido bendecido un millón de veces a cambio con el amor y el apoyo del pueblo estadounidense", dijo.
Biden aún no ha dado detalles sobre sus planes posteriores a la presidencia.
Él y la primera dama planean viajar directamente desde la inauguración al centro de California para pasar tiempo personal, dijeron tres funcionarios de la administración. La pareja planea quedarse en el condado de Santa Bárbara, aunque los incendios forestales en Los Ángeles podrían afectar sus planes, dijeron los funcionarios.
La semana pasada, un periodista le preguntó a Biden sobre sus planes después de dejar el cargo: ¿Hablaría después de la presidencia o estaría "fuera de la vista y fuera de la mente"?
"No voy a estar fuera de la vista ni fuera de la mente", respondió Biden.