DETROIT - Ante la inminencia de una huelga, el grupo que representa a los puertos de la costa Este y del Golfo solicita a una agencia federal que obligue al sindicato de estibadores a sentarse a la mesa de negociación para negociar un nuevo contrato.
La Alianza Marítima de Estados Unidos ha presentado una denuncia por prácticas laborales desleales ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales, alegando que la Asociación Internacional de Estibadores no está negociando de buena fe.
La alianza dijo en una declaración preparada el jueves que presentó la acusación "debido a la reiterada negativa de la ILA a sentarse a la mesa y negociar un nuevo contrato marco".
Los puertos piden una solución inmediata, una orden que obligue al sindicato a reanudar la negociación. No está claro con qué celeridad actuará la NLRB. Se dejó un mensaje en busca de comentarios de la agencia. Es poco probable que la NLRB se pronuncie sobre la demanda antes del martes, fecha límite para la huelga, y sin conversaciones programadas, la huelga parece probable.
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La solicitud de la NLRB se produce sólo cuatro días antes de que expire el contrato de seis años de la ILA con los puertos, y el sindicato que representa a 45,000 trabajadores portuarios de Maine a Texas dice que irá a la huelga a las 12:01 a.m. del martes.
Las dos partes no han negociado desde junio en una disputa en gran parte sobre los salarios y una prohibición propuesta por el sindicato sobre el aumento de la automatización de las grúas portuarias, puertas y camiones que podría costar puestos de trabajo.
También se dejó un mensaje el jueves en busca de comentarios del sindicato.
"La USMX ha dejado claro que valora el trabajo de la ILA y tiene un gran respeto por sus miembros", dice el comunicado de la alianza. "Tenemos una historia compartida de trabajo conjunto y estamos comprometidos con la negociación".
En las primeras negociaciones, los analistas del sector afirman que el sindicato pretendía un aumento salarial del 77% en seis años para compensar la inflación y dar a los trabajadores una parte de los miles de millones ganados por las navieras desde la pandemia de coronavirus.
El sindicato afirma que ambas partes se han comunicado varias veces en las últimas semanas, pero que la situación sigue estancada porque la Alianza Marítima ofrece un aumento salarial inaceptable.
Los trabajadores portuarios más cualificados cobran ahora un salario base de $39 la hora, o algo más de $81,000 al año. Pero con las horas extraordinarias y otras prestaciones, algunos pueden llegar a ganar más de $200,000 al año. Ni el sindicato ni los puertos quieren hablar de niveles salariales. Pero un informe de 2019-2020 de la Comisión Waterfront, que supervisa el puerto de Nueva York, dijo que alrededor de un tercio de los estibadores con sede allí ganaban $200,000 o más.
En un comunicado emitido el lunes, la ILA dijo que refuta las afirmaciones que atribuye a la alianza de que las demandas del sindicato equivalen a un aumento salarial de más del 75% durante la vigencia del contrato.
"Engañar al público con cálculos engañosos no va a ayudar a conseguir un acuerdo con el ILA", dijo el presidente Harold Daggett en el comunicado emitido el lunes.
El sindicato ha afirmado que los transportistas han ganado miles de millones desde que comenzó la pandemia. Maersk, con sede en Copenhague, una de las mayores navieras de contenedores del mundo, obtuvo beneficios de más de $50,000 millones en los últimos cuatro años. Sin embargo, los beneficios se redujeron sustancialmente en 2023, cuando la demanda de los consumidores en la época de la pandemia disminuyó y los fletes volvieron a subir por las nubes.
Una huelga cerraría hasta 36 puertos que manejan casi la mitad de la carga que entra y sale de EEUU en barcos.
Si la huelga se resolviera en pocas semanas, los consumidores probablemente no notarían una gran escasez de productos. Muchos minoristas y otras empresas han hecho acopio de productos en previsión de una huelga.
Pero una huelga que se prolongara durante más de un mes probablemente provocaría la escasez de algunos productos de consumo, aunque la mayoría de los productos navideños ya han llegado del extranjero.
Una huelga prolongada perjudicaría casi con toda seguridad a la economía estadounidense. Incluso una huelga breve causaría trastornos. Es probable que se produjera un aumento del tráfico de vehículos en puntos clave del país al desviarse la carga a los puertos de la costa oeste, donde los trabajadores pertenecen a otro sindicato que no participa en la huelga. Y una vez que el sindicato de estibadores volviera al trabajo, es probable que se produjera un retraso en la llegada de los barcos. Por cada día de huelga portuaria, los expertos dicen que se tarda entre cuatro y seis días en despejarla.
Si se produce una huelga, sería el primer paro nacional del ILA desde 1977.
