En lo que va de año en nuestra región se han registrado al menos 44 choques en los que 47 personas han muerto. Esta cifra solamente incluye eventos ocurridos hasta hace dos semanas atrás y no toma en consideración los que sucedieron recientemente en el puente Queen Isabella, donde dos personas perdieron la vida.
Tampoco cuantifica otras tragedias más recientes como la del sur de Weslaco, donde dos autos chocaron de frente y murió un hombre. Como tampoco incluye un accidente en la carretera 280, en la comunidad de Los Venados, donde una camioneta se volcó al explotarle un neumático y en el que una fémina de 20 años falleció.
Igualmente, en el Condado Starr un hombre de 62 años y residente de Galveston murió al quedarse dormido y su camioneta salió de la carretera, volcándose varias veces.
"Al examinar otros choques mortales en nuestra región, el error o el comportamiento del conductor es el principal factor que contribuye a la mayoría de los choques mortales. En nuestra región conducir bajo los efectos de alcohol, por arriba del límite de velocidad, conducir distraído y sin cinturón de seguridad siguen siendo problemáticos", advirtió Ray Pedraza, portavoz del Departamento de Transporte de Texas (DTOP, por sus siglas en inglés).
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Además, en este periodo de vacaciones que ya muchos se encuentran disfrutando, "hay que conducir con mucho más cuidado y enfocarse en el camino", añade Pedraza. Igualmente es buen momento para meditar sobre los hábitos que tiene cada quien al momento de conducir.
Lo que encabeza la lista de muertes en la carretera son los choque causados por conductores ebrios. "En el 2023 más de 1,000 personas perdieron la vida bajo los efectos del alcohol", destacó el portavoz del DTOP, quien dijo que la cifra de accidentes podría aumentar de forma considerable en los próximos meses.
