MISSION- Cada vez son más los riesgos que enfrentan los inmigrantes indocumentados al cruzar la frontera por el Valle de Texas.
Además de las fuertes corrientes del Río Grande que dificulta el cruce de inmigrantes por balsa o nadando, existe otro peligro en el agua que pudiera ser mortal: la presencia de caimanes.
Aunque miles han logrado sobrevivir las aguas de este río, hay quienes han decidido no arriesgar sus vidas por temos a ser devorados. "No, no. Se corre por el peligro. Yo no me aviento si hay un cocodrilo ahí en el Río Bravo, dijo "Diego", quien se identificó como un inmigrante.
Algunos aseguran que estos reptiles no estaban aquí antes y que alguien los pudo haber echado allí. Mientras, que autoridades afirman que se debe a eventos naturales y ahora han hecho del río su territorio.