HOUSTON - Recientes acciones del gobierno de Texas dejan en claro que está jugado al 100% con la intención de la futura administración Trump de endurecer al máximo la política migratoria del país y desarrollar un plan de deportación masiva.
En las últimas horas se han conocido acciones y pronunciamientos de altos funcionaros estatales que así lo muestran.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, publicó este martes videos de la implementación de nuevas boyas en el río Grande (río Bravo) en un claro desafío a la administración del presidente Biden que pidió que se retiraran.
Texas placed more buoys in the Rio Grande River this morning.
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) November 20, 2024
Despite the Biden-Harris Administration’s attempts to shut down our border security efforts, the buoys are here to stay.
We won't back down from our mission to deter & repel illegal immigration. pic.twitter.com/mpfdZhTyO2
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“Texas puso más boyas en el río Grande esta mañana, a pesar de los intentos de la administración Biden-Harris por echar a tierra nuestros esfuerzos por asegurar la frontera, las boyas están aquí para quedarse”, dijo el gobernador Abbott.
“No vamos a echar para atrás en nuestra misión por detener y repeler la migración ilegal”, agregó el gobernador, quien pocas horas después publicó fotografías de las acciones que ha tomado en la frontera.
En ellas se ve la construcción del muro, la instalación de barreras de alambre y ejercicios militares “para responder a la migración masiva”.
Razor wire barriers.
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) November 20, 2024
Texas border wall construction.
Mass migration response exercises.
Texas is doing all this and more to secure the southern border, because we know that border security = national security. pic.twitter.com/1HmKVZNNKr
En esta última fotografía se ve a soldados de la Guardia Nacional usar escudos protectores en posición de combate.
A esto se suma el ofrecimiento por parte de la Oficina General de Tierras de Texas ofreció un terreno de 1,400 acres en el Condado Star (en el área del valle del Río Grande) para que se construya un centro de detención que sirva para ejecutar el plan de deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados.
En una carta enviada al presidente electo, Donald Trump, la comisionada Dawn Buckingham, dijo que el terreno está a unas 35 millas al oeste de McAllen, la oficina que dirige “está completamente preparada para entrar en un acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional, ICE o la Patrulla Fronteriza de Estados unidos para permitir que se construya un centro de procesamiento, detención y coordinación de la más grande deportación de criminales violentos en la historia de nuestra nación”.
Según Buckingham, el terreno que fue recientemente adquirido por Texas servía en el pasado para que “miembros de carteles criminales y otros criminales violaran mujeres y niños migrantes”.