CIUDAD DE MÉXICO — El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador afirmó el martes que los 19 asesinatos ocurridos en el estado sureño de Chiapas, cerca de la frontera con Guatemala, se debieron a disputas entre dos organizaciones delictivas.
Durante su conferencia matutina López Obrador admitió que la lucha que mantienen dos grupos rivales en la región fronteriza de Chiapas “ya lleva tiempo” e indicó que los recientes incidentes fueron motivados por el “tráfico de drogas y también de migrantes”.
La Fiscalía del estado de Chiapas asumió desde el fin de semana las investigaciones del caso luego de que las fuerzas policiales y militares encontraron los cuerpos apilados en un camión que estaba abandonado en un camino rural cerca del poblado de La Concordia, que está a unas 80 millas de la frontera con Guatemala.
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Las autoridades no han informado cuándo se registraron las muertes, pero hicieron referencia a un video que se difundió en las redes sociales el 28 de junio en el que aparecían varias personas sin vida en un camión.
Entre las víctimas han sido identificados al menos seis hombres que portaban documentos de identidad guatemaltecos.
Los asesinatos fueron atribuidos a la lucha territorial que mantiene el Cártel de Sinaloa con una banda rival conocida como el Cártel de Chiapas. Esta última banda podría tener vínculos con el archirrival de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación.
La violencia que se ha desatado en los últimos meses en el estado de Chiapas ha llevado a miles de personas a huir de sus hogares.
En mayo fue asesinada una candidata a alcalde de La Concordia, Lucero López Maza, y otras cinco personas en medio de un mitin.
El ataque armado se registró pocos días después de que 11 personas murieran en un tiroteo en un pueblo del municipio de Chicomuselo de Chiapas.
