Las declaraciones del procurador general de California respecto al arresto del líder de la Iglesia La Luz del Mundo por acusaciones de tráfico de personas y violación de menores podrían haber sesgado al posible jurado, alegaron el viernes abogados defensores.
El procurador Xavier Becerra dijo el jueves que creía que había más víctimas de abuso sexual de parte del autoproclamado apóstol Naasón Joaquín García y que temía que los millones de seguidores de la Iglesia con sede en México pudieran reunir los 50 millones de dólares que se le fijaron como fianza.
Los abogados Ken Rosenfeld y Allen Sawyer dijeron que Joaquín García y su familia están pagando los costos legales correspondientes y que la Iglesia no está involucrada financieramente. Los abogados, acompañados de familiares de Joaquín García y feligreses, hablaron el viernes en una conferencia de prensa bilingüe frente a uno de los templos de La Luz del Mundo en el este de Los Ángeles, en la que calificaron las acusaciones como “falsas”.
El líder religioso y otras dos implicadas fueron arrestadas en California esta semana, y una cuarta continúa prófuga. Se les imputaron 26 cargos por delitos graves como violación de menores, agresión sexual infantil, tráfico humano, pornografía infantil y extorsión.
“Ayer fue un día triste para el sistema de justicia criminal en California”, dijo Sawyer, quien señaló que Becerra había descrito a Joaquín García como “demente”.
“¿Cómo se supone que el señor Joaquín García tendrá un juicio justo?”, agregó.
Bibiana Ochoa, de 42 años, una feligresa de Salt Lake City, dijo el viernes que las “falsas acusaciones” han causado una “profunda tristeza” a La Luz del Mundo.
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“Regresaremos al apóstol con su rebaño”, dijo Rosenfeld. “Cinco millones de fieles apoyan a un hombre acusado equivocadamente”.
Los tres acusados que están bajo custodia hicieron su primera comparecencia ante la corte en Los Ángeles el miércoles. No rindieron declaratoria. Regresarán el lunes para su audiencia de instrucción de cargos.
Naasón Joaquín estaba representado originalmente por Dmitry Gorin y Alan Eisner. Pero luego contrató a Rosenfeld y Sawyer, quienes dijeron que los otros abogados sólo manejaron la primera comparecencia.
Los abogados dijeron que las figuras de renombre suelen ser objeto de falsas acusaciones.
Rosenfeld afirmó que Joaquín García era “víctima de un ataque con tecnología de punta”, pero no brindó detalles.
La denuncia penal no menciona el uso de tecnología más allá de la producción y distribución de pornografía infantil.
La oficina de Becerra no hizo comentarios por el momento.
