McALLEN, Texas - Brenda Belinda Barba, de 33 años y residente en Spring, Texas, fue condenada a tres años en prisión, por exportar armas de fuego y municiones, anunció el fiscal federal Alamdar S. Hamdani en un comunicado de prensa.
Barba se declaró culpable el 7 de abril de 2022.
La jueza de distrito Micaela Álvarez ordenó este jueves 18 de mayo que Barba cumpla 36 meses en una prisión federal, seguidos inmediatamente por tres años de libertad supervisada. En la vista, el tribunal escuchó pruebas adicionales sobre los mensajes de WhatsApp que Barba envió la mañana de su detención negociando las compras y el transporte de las armas de fuego.
Al dictar la sentencia el tribunal señaló que los cárteles utilizan todo tipo de armas, las que suponen un peligro para la seguridad de todas las comunidades. La jueza Álvarez también destacó cómo la historia de Barba sobre llevar las armas de fuego al rancho de su familia no coincidía con los mensajes que envió describiendo su voluntad de llevar y transportar tantas como fuera necesario.
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En el momento de su declaración de culpabilidad, Barba admitió haber intentado exportar ilegalmente una pistola Glock de 9 mm, una pistola Glock de calibre 22, cuatro cargadores para pistola Glock y 550 cartuchos de munición de diversos calibres.
El 29 de noviembre de 2021, Barba intentó salir de Estados Unidos por el puerto de entrada de Anzalduas. En ese momento, dijo a las fuerzas del orden que no tenía nada que declarar, incluidas las armas de fuego y la munición. Sin embargo, al inspeccionar el vehículo, las autoridades descubrieron dos pistolas, cargadores y munición oculta en su bolso. Barba dijo a los agentes que había comprado las armas en una tienda de Academy Sports and Outdoors y que pensaba llevárselas al rancho de su familia en México.
Barba no era un exportador de armas autorizado y no tenía permiso para exportar las armas a México.
Se permitió a Barba permanecer en libertad bajo fianza y entregarse voluntariamente en un centro de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos que se determinará en un futuro próximo.
Homeland Security Investigations llevó a cabo la investigación con la ayuda de Aduanas y Protección de Fronteras. Los fiscales adjuntos Lee Fry y Rick Blaylock llevaron el caso.
