Tabatha Sullivent, quien sufrió graves heridas el pasado 4 de julio cuando fue atacada por un tiburón en la Isla del Padre Sur, finalmente dio sus primeros pasos.
La mujer, que reside en Celina, Texas, es una de las cuatro personas que fueron víctimas de un tiburón en aguas poco profundas. Ese día ella perdió su pantorrilla mientras que su esposo Cary sufrió un corte en el pie y la rodilla.
Ellos no fueron los únicos que sufrieron heridas por un tiburón el el 4 de julio, lo que generó miedo en la comunidad. Sin embargo, esta familia a pesar de no ser del Valle de Texas ha estado en el hospital desde entonces.
“He escuchado que personas ya no quieren visitar la playa. Ya no quieren llevar a sus hijos a la playa. Y yo le estoy diciendo a las personas que es lo mismo de siempre. Nadamos con tiburones y con delfines. Lamentablemente fui una en un millón, estaba en el lugar y tiempo equivocado”, dijo Tabatha.
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Tabatha atravesó por una cirugía y ahora se encuentra en un centro de rehabilitación en McAllen. Su motivación principal para recuperarse pronto es su familia y asegura que ve la vida con agradecimiento.
Incluso, Tabatha afirma que ha estado avanzando rápidamente, ya que apenas esta semana inicio sus terapias y en tan solo días ha podido caminar poco a poco, poniendo peso en su pantorrilla. Inicialmente pensó que no pasaría en un largo tiempo.
Al hablar sobre el momento que le cambió la vida, Tabatha asegura que esta experiencia la ha ayudado a crecer de manera muy única y cree que no será ningún obstáculo para seguir adelante y viajar con su familia.