El gobernador Greg Abbott anunció que el estado de Texas ya tiene preparados planes de asignación para distribuir rápidamente medicamentos y vacunas que ahora están disponibles para el tratamiento de COVID-19.
El lunes, la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) autorizó el uso inmediato del primer tratamiento médico desarrollado para personas que contraen COVID-19. Se ha demostrado que el fármaco elaborado con anticuerpos del coronavirus Sars CoV-2 de Eli Lilly & Co., llamado bamlanivimab, mejora los síntomas de las personas que contraen el virus y previene las hospitalizaciones.
La FDA señaló que el medicamento está autorizado para pacientes con alto riesgo de progresar a COVID-19 grave, incluidas personas de 65 años o más, o que tienen ciertas afecciones médicas preexistentes.
Se espera que el laboratorio envíe de inmediato aproximadamente 80 mil dosis en todo el país, incluido Texas, sin costo para los estados. Lilly se comprometió tener hasta un millón de dosis para fin de año.
De manera similar al tratamiento con anticuerpos de Lilly, Regeneron Pharmaceuticals Inc. también ha solicitado la autorización de uso de emergencia de la FDA de su propio tratamiento médico con anticuerpos COVID-19 para tratar a los pacientes antes de que se enfermen gravemente y ayudar a reducir las hospitalizaciones, y se espera tener pronto un anuncio de la decisión de la FDA. Este es el mismo fármaco de anticuerpos que tomó el presidente Donald Trump para recuperarse rápidamente del COVID-19 el mes pasado.
El gobierno federal acordó comprar cientos de miles de dosis de los dos nuevos medicamentos de tratamiento y se encargará de asignar los suministros a los estados, que a su vez determinarán la distribución a los hospitales y centros de salud. Es probable que las dosis se asignen a los estados y territorios de los EEUU en función de su porcentaje de pacientes hospitalizados e infectados.
El estado de Texas ya se ha preparado para distribuir las vacunas y los tratamientos médicos COVID-19.
El Gobernador Abbott señaló que: "A medida que anticipamos la llegada de las vacunas y tratamientos COVID-19, el estado de Texas está preparado para distribuir rápidamente esos medicamentos a los tejanos que voluntariamente elijan usarlos".
